Desde el primer momento en el que te conviertes en propietario de un arma, el siguiente paso que debes dar, es la compra de un armero.
Ya sea que vivas solo o con tu familia, este tipo de estructuras son las que te van a permitir mantenerte tranquilo y al mismo tiempo seguro, al saber que nadie podrá sustraerla sin tu autorización.
¡Esa es la idea!
Y para que logres ese nivel de resguardo, hoy te diremos por qué debes utilizar un armero.
Normativa sobre los Armeros
El porte de armas en España, está muy lejos aún de las cifras que se manejan en los Estados Unidos.
Las estadísticas hablan de 7,5 armas por cada 100 habitantes.
Quienes las portan, las usan con fines determinados, como el resguardo personal, de la propiedad, al ejercer un servicio policial o actividades de caza.
En cada caso, es necesario contar con un armero, pero sobre todo cuando se trata de armas cortas o revólveres, es importante cumplir con los requisitos de alta seguridad, adquiriendo un armero homologado.
De acuerdo a la Norma UNE 2012, los armeros homologados de grado I corresponden al resguardo de arma larga rayada y de cañones de uso particular.
Mientras que los de grado III o de alta seguridad, están destinados para armas cortas de uso particular, empresas de seguridad o vigilancia.
Otro punto a destacar, es que desde el año 2018 existe una nueva normativa, en la que tanto AENOR como APPLUS, son los encargados de certificar que cada armero haya sido fabricado de acuerdo a dicho reglamento.
Todo esto, a fin de garantizar tu seguridad y la de los tuyos, con la responsabilidad que amerita.
¿Por qué debo utilizar un armero?
Si la normativa que te hemos indicado te ha puesto a pensar, entonces ya estás entendiendo la importancia de contar con un armero si eres portador de un arma.
Así que, profundicemos un poco más, y veamos por qué debes utilizar un armero.
1. Protege su arma de un posible robo
Esta es una de las razones más obvias por la que debes hacerte con un armero.
Y es que, hay casos reportados de ladrones o intrusos que roban el arma del propietario, y las utilizan para llevar a cabo actividades delictivas.
Además de eso, tu arma también ha sido una inversión, y de ninguna manera puedes permitirte perderla.
En este sentido, los armeros son ideales, ya que se trata de cajas de metal irrompibles, con un sistema de bloqueo lo suficientemente seguro, como para que nadie pueda acceder sin autorización.
2. Mantiene el arma fuera del alcance de los niños
Los accidentes con armas ocurren todo el tiempo; es por ello que, tener un armero en casa, impedirá que la uses a menos que debas hacerlo.
Si tienes hijos o niños en casa, esto es una prioridad.
Según las estadísticas, 1 niño muere cada día producto de un accidente con arma, y tú puedes hacer que las probabilidades en tu caso sean nulas, al mantener el arma fuera del alcance de los niños con un armero.
Así te sentirás más seguro, ya que eliminas todas las posibilidades de que alguien tenga acceso a ella.
3. Acceso rápido y seguro
Ocultar el arma en cualquier lugar de la casa para tener un rápido acceso a ella, podría salir muy caro.
Y allí es donde los armeros vienen al rescate, porque te permiten acceder al arma de forma rápida y segura.
Solo intenta ubicar el armero en el lugar de la casa que mejor creas conveniente, y recuerda que solo tú tienes acceso a través de un código de seguridad, que te permitirá abrirlo en fracciones de segundo.
De modo que, piensa estratégicamente dónde la ubicarás y cómo actuarás ante una situación de emergencia en la que debas acceder rápidamente a ella.
4. Cumplimiento de la normativa
Como te comentamos, en España existen normativas dirigidas a que los portadores de armas las resguarden en un lugar seguro.
La mejor manera de hacerlo es a través de un armero homologado.
Incluso si no hay niños en casa, debes cumplir con la normativa, para la máxima seguridad de las personas que te rodean.
5. Una inversión que vale la pena
Y no menos importante, otra de las razones por las cuales debes utilizar un armero es que estarás haciendo una inversión a largo plazo.
Con él, le ofreces a tu armamento una protección contra un uso no autorizado, contra el robo y el fuego.
Y adicionalmente, te quedará espacio para resguardar uno que otro objeto valioso junto a tu arma, para así sentirte tranquilo el resto del día.
¿Suficientes razones para ti?
Es hora de hacerte con un armero.